28 de julio de 2008

Conferencia-Dhikr Centro de Yoga Arati de sheij kabbani

Gira por España de:

Sheij Muhammad Hisham Kabbani

Domingo 3 de Junio de 2007

Conferencia-Dhikr Centro de Yoga Arati

Madrid


Audhu billahi minassheitani rayim bismillahi rahmani rahiim
Me protejo en Allah del Sheitan el maldito, en el nombre de Allah el Misericordioso, el Compasivo

Pienso que todos los asistentes piensan que hay un creador. Si hubiera alguien que cree que no hay un creador entonces nuestra lección de hoy tendría que tomar otro sentido. No voy a probar que hay un creador, vamos a partir de la base de que hay un creador.

Cuando hay un creador, hay siervos. Los siervos son gentes que deben tener un anhelo espiritual. Si no van a ser espirituales no les podemos llamar siervos, diremos que han perdido el tren de la vía correcta. España es un país muy bendito y estoy muy contento de ver esta hermosa gente que se ha reunido hoy aquí. Hay muchos santos en este país. En cada esquina de este país hay un toque de un santo. Cuando hemos venido conduciendo hasta aquí he sentido la presencia de muchos santos que están en esta área y que están dando bendición a la gente de este país. Es un país donde se han encontrado muchas culturas. Es como Jerusalén, donde puedes encontrar los judíos que creen en Moisés, los Cristianos que creen en Jesús y los musulmanes que creen en Muhammad (s.a.w.s.). Y en España se puede apreciar la huella de todos ellos por todas partes. Al lado de esto también encontramos los budistas, los hinduistas y otras creencias. Y esto produce un bello jardín de diferentes flores y diferentes colores. Cada corazón es diferente, cada persona tiene un corazón diferente y esto hace que este país sea tan bello, que halla una riqueza de colores tan variados. Nuestro señor creó a todos y todos son creados y amados por Él sin diferencia.

Sheij Abdul Wahid, Alia, su esposa, es arquitecto, ¿no es así?. (Alía contesta que sí). ¿Te gustan tus dibujos? Algunos de ellos (contesta Alia). Pero hasta los que no te salen bien te gustan porque empleas mucho tiempo en hacerlos. ¿Qué pensamos pues del creador quien ha hecho la arquitectura y el retrato de cada uno de nosotros? Si vais a un museo o a una galería de arte, todos los artistas que exponen allí les gustan sus obras. Si vas a una galería y le dices al artista: este cuadro no me gusta. El artista se sentirá dolido y dirá porqué me dices eso, he empleado toda mi energía, mi tiempo y mi amor en hacer esto cómo puedes decir que esto no es bello. Dios ha creado a cada uno de una forma perfecta porque Él es el creador y no puede crear nada que no sea perfecto. Y es nuestro deber mirar a todo el mundo como perfecto.

Hoy en día algunas personas dicen : Este no me gusta, ese no me gusta, ese no es bueno, … ¿Quién es bueno?, yo soy bueno. Este es el problema. Aquí es donde viene la espiritualidad a purificar el comportamiento de las personas. Por esto es por lo que Dios ha enviado el espíritu santo, los profetas, el sello de los profetas, sayydina Muhammad (s.a.w.s.) y a los herederos de los profetas, los santos, para guiar a la gente en su vida cotidiana. Los santos tienen sus diferentes formas, pero todos ellos se dirigen al mismo Océano. Todas las corrientes de agua van a parar a un río y todos los ríos van a parar al Océano.

¿Por qué hay sal en el Océano? Me ha llegado esta pregunta de mi maestro Mawlana Sheij Nazim y yo os la envío a vosotros, ¿por qué hay sal en el Océano y no la hay en los ríos? Si fuera por los peces diremos que hay peces en el mar y también los hay en los lagos. Entonces debe haber otro secreto que nos instruya acerca de esto. Si me preguntáis a mí, no lo se. Pero tenemos que pensar, no podemos decir no lo se y lo dejamos así. Tenemos que pensar qué es lo que hay ahí, ¿por qué hay sal en el Océano?

Antiguamente, cuando alguien estaba enfermo o tenía algún problema en su boca, se le daba sal. En casi todas las bebidas que tomamos vemos que hay sodio, en la comida hay sodio. En la mayoría de los alimentos hay sal. El profeta Muhammad (s.a.w.s.) dijo: si empezáis cada comida con sal Allah quitará 70 enfermedades de vosotros y si finalizáis la comida con sal quitará otras 70 enfermedades. Esto quiere decir que hay un secreto en la sal.

Especialmente debemos saber que hay dos tipos de alimento. El alimento físico y el alimento espiritual. En todo alimento físico hay sal y como dijo el profeta Muhammad (s.a.w.s.) el estómago de las personas es la casa de las enfermedades, por esto es por lo que cuando nos ponemos enfermos lo primero que el médico nos controla es la dieta. Antes solían comer de todo y vivían 100 años o 120 o 130 años. Hoy se viven 60, 70 y si se alcanzan los 80 se dice que esa persona ha vivido una larga vida. Antiguamente no se hacían dietas y hoy todo el mundo hace dietas. Esto es porque antes, gracias al conocimiento aportado por el profeta Muhammad (s.a.w.s.) ellos sabían que tenían que comer sal antes y después de comer para prevenir todas las enfermedades, gracias éste conocimiento profético nunca se ponían enfermos y tenías largas vidas.

Hoy dicen, medicina china, medicina natural, …,esto está bien, es correcto, pero también hay medicina espiritual, medicina profética. Con que la mano de un santo toque a una persona enferma, es suficiente para sanarla. El profeta Muhammad (s.a.w.s.) dijo somos un grupo de gente que no come hasta que no tiene hambre y cuando tiene hambre come pero no se llena, (así que vosotros sabréis). Así que por esta razón eran capaces de controlar sus cuerpos y vivir largas vidas.

Hoy la gente hace futing en las calles, no se cansan de correr, yo me canso sólo de verlos. Correr está bien. Pero hay dos formas de correr, correr para tu cuerpo o correr para tu espíritu. Ahora vamos a ver el porqué de que en el océano haya sal. Los santos de Allah son como ríos, dulces. Los ríos corren. Hay pequeñas corrientes de agua, arroyos, ríos, algunos muy caudalosos que incluso no puedes ni meter el pié en ellos porque te llevan. Los santos de Allah son como estos ríos. Hay santos que te arrastran con mucha fuerza. También hay santos que son como arroyos que te llevan suavemente. Estos santos sólo con mirarnos saben cuales son nuestras enfermedades y su cometido es limpiarnos. Es como cuando tenemos ropa sucia y la metemos en la lavadora para lavarla.

Debéis estar muy contentos de tener un maestro que puede limpiaros, prepararos, haceros crecer en lo espiritual y en lo físico equilibrando ambos aspectos del ser humano, y así convertiros en seres humanos completos. También protege vuestra vida y vuestras familias. Pero los santos tienen alrededor gente con orígenes y raíces muy dispares. Como los maestros de música clásica que tienen diferentes instrumentistas. Pero si todos ellos no tocan con un buen ritmo molestan al oído. Así que el maestro los perfecciona, los afina y así empezáis a tocar bajo la batuta del maestro que no para de trabajar, de subir, bajar, sudar, etc., para armonizar toda la orquesta. Al principio no había armonía todos los instrumentistas eran salvajes. Y al final, el director consigue que todos juntos trabajen como un equipo y hagan algo bello.

Los santos que son como las cataratas del Niágara, que tienen esta fuente de energía tan enorme que les llega del cosmos. Son tan fuertes que pueden mover todo tipo de rocas y las mueven hasta el final de su camino. Y ese lugar donde tienen que terminar es el Océano. Cuando algo llega al Océano se convierte en el Océano, se somete completamente al Océano y allí se encuentra en calma, en paz. Nuestros corazones son como rocas y cuando el Océano choca contra la roca un día y otro día y otro día…y así durante años, ¿qué ocurre? Que se convierte en una piedra suave, pulida y bella. Esa sal con esa agua son los que hacen el trabajo de pulir.

Esto es lo que hace un maestro con sus discípulos y esto es lo que hace Allah con sus profetas. El maestro toma a sus discípulos y los lleva al Océano, al Océano de Moisés, al océano de Jesús, al océano de Muhammad (s.a.w.s.) y allí a través de la sal se produce un proceso de limpieza. Cuando tomas una roca en la montaña la roca es áspera, no está pulida pero si vas a la playa la roca es suave.

Los santos de Allah toman esas rocas, la envían al océano donde se limpian y pulen. Si no tuviéramos un maestro que nos guiara, hombres o mujeres, porque Dios ha creado una sola cualidad para los hombres mujeres, no hay diferencia. Dios dio más a las mujeres pues ellas son más emocionales, más amorosas, más sinceras, más suaves. Los hombres son duros, rudos, difíciles, no están contentos con nada, algunos también son suaves pero a las mujeres las ha dado más. Por eso podemos encontrar hombres santos y también mujeres santas.

Pero todos nosotros necesitamos luz. Si no hubiera luz en esta habitación no podríamos vernos. Los santos iluminan la luz de nuestros corazones para vernos unos a otros. De otra manera cada uno sólo se vería a sí mismo. Los santos juntan a la gente y les guían de forma que puedan pulirse los corazones, porque en el corazón hay diferentes tipos de niveles y depende de en qué nivel te encuentras.

Hay monasterios con miles de peldaños y hay otros con veinte escalones dónde es fácil subir. Así que todo depende de a qué niveles de tu corazón quieres subir porque el corazón de un creyente es la casa de Dios. El profeta Muhammad (s.a.w.s.) dijo: "El corazón del creyente es la casa de Dios". Y Dios dijo a través del profeta:" no hay nada en este universo que me pueda contener, sin embargo, el corazón del creyente me contiene".

Así que el corazón de cada uno está preparado para recibir esa manifestación de la luz divina. ¿Cómo encontrarlo, como verlo? ¿Hay algún budista aquí? Uno. Porque buda estaba buscando la verdad. Él era el hijo de un rey y emigró, dejo su reino, su familia, para buscar la verdad. ¿Cuántos cristianos hay aquí? ¿Cuántos musulmanes? ¿Cuántos judíos? Hemos pensado alguna vez cuando miramos éste universo, cómo ha sido hecho. Como somos judíos, cristianos, budistas, musulmanes, creemos en un creador, pero ¿pensamos quién creó este universo? ¿Quién puso la luna ahí, el sol allá, Marte ahí, Venus allá? Y además ¿cómo se mantienen ahí en sus órbitas sin caerse?, ¿quién sujeta todo esto? Esto es lo que es importante. Aquel que les mantiene es el que nos mantiene a nosotros, porque nosotros también somos universos. Somos universos inmensos.

Si os fijáis en la forma que hemos sido creados, tenemos las venas, los capilares que son más finos que los pelos y hay millones y millones. Estos capilares están huecos y la sangre corre por dentro, ¿cómo puede ser esto? ¿Os dais cuenta de la grandeza de Allah? No existe ninguna máquina que pueda hacer esto, no hay forma que los científicos hagan una cosa tan pequeña por donde corra la sangre.¿Y qué lleva la sangre a través de esos millones y millones de capilares? Lleva oxígeno para limpiar todos los venenos del cuerpo. Inhalamos oxígeno y exhalamos anhídrido carbónico. ¿Por qué no inhalamos anhídrido carbónico?, ¿Cómo nuestra nariz sabe lo que es oxígeno y lo que es anhídrido carbónico? Nosotros inhalamos oxígeno pero ¿por qué no inhalamos anhídrido carbónico que también está aquí puesto que todos lo estamos exhalando? ¿Cómo somos capaces de tomar sólo el oxígeno?, ¿Quién hace esto?, ¿Nosotros?, ¿O el creador?

Aquí está la importancia del guía en nuestras vidas. Estamos en España que es un país de santos y muy cerca del norte de Asia, donde también hay muchos santos. En estos lugares se puede sentir la presencia de los santos que son como luces que hacen brillar nuestros corazones. Si traemos una lámpara de aceite, vemos que el cristal que recubre la lámpara se vuelve negro con el uso. Nuestro corazón es como ese cristal que necesita ser limpiado especialmente por dentro porque no se ensucia por fuera sino que lo hace por dentro.

Si la llama de nuestros corazones fuera como la llama de Jesús, de Moisés o de Muhammad (s.a.w.s.), entonces nuestra llama sería la llama de la felicidad, de la iluminación, sería la llama de Dios, pero si esa llama está sometida a los bajos deseos entonces esa lámpara debe ser limpiada por dentro, tenemos que quitar el cristal y pulirlo desde dentro. Y ese guía del que hablábamos es el único que puede limpiarnos la suciedad del mal desde dentro.

Cuando nuestro interior está limpio nuestro exterior es fácil, como un reloj. Un reloj sin pilas no se mueve pero si tiene pilas el reloj se mueve. Por eso lo importante no es limpiar y pulir nuestro exterior sino limpiar y pulir nuestro interior. Arreglar el exterior es fácil para un hombre o una mujer: se pone un bonito vestido y aparece como una persona limpia pero no sabemos lo que hay detrás de ello. Mirad a esos terroristas que mataron a 200 personas aquí. Nadie sospechaba de ellos, tenían una vida normal, se vestían bien, se comportaban bien, pero nadie sabía lo que guardaban en su interior, su interior estaba sucio.

Así que nosotros debemos enfocar nuestra energía en la vida espiritual, como la gente que hay hoy aquí que está buscando lo espiritual pues de otra manera no estarían aquí. Yo soy como vosotros, yo también estoy tratando de arreglar mi interior, de limpiar mi suciedad. Todos somos iguales, todos somos hijo de Adam. Así que lo que todos necesitamos es purificar nuestro interior.

Nosotros también somos terroristas con nosotros mismos porque nos torturamos y abusamos de nosotros mismos, no somos capaces de equilibrar nuestra espiritualidad con nuestra vida cotidiana. Si fuéramos capaces de parar esa tortura y abuso de nosotros mismos equilibrándonos la espiritualidad con nuestra vida cotidiana, y por esto es por lo que encuentros como este son importantes, para sanarnos, psicológicamente nos daría mucha energía y mucha fuerza para cargarnos las pilas, y así cargarlas más y más, pues si no las cargamos, las pilas mueren.

Hay gente que se carga las pilas haciendo futing, pues a través del ejercicio uno limpia su cuerpo, lo oxigena y también se relaja, pues cuando se corre no se piensa sobre nada, solo se piensa en correr, en el movimiento, por esto es por lo que en espiritualidad el movimiento es muy importante.

Así que parecido a correr es rezar. Mantened la oración y rezad y rezad hasta que os canséis, entonces paráis. Pero con la oración es difícil, correr es más fácil. ¿Por qué? Porque correr te hace sentir bien pero rezar es rezar a Dios y a Sheitan esto no le gusta. Por esto es por lo que los profetas acostumbraban a rezar día y noche. Pero nosotros lo tenemos más fácil, no se nos pide que recemos como los profetas, en lugar de 50 oraciones tenemos 5.

Por esto es por lo que en espiritualidad nuestra actividad física es importante de modo que nos enfoquemos sin pensar en la meditación de la relación de nuestro corazón con Dios. También vemos que la gente cuando hace futing escucha música o incluso escucha Corán, lo cual está permitido, e incluso hay gente que cuando corre escucha a los santos. Depende de los auriculares que tenga cada uno, algunos escuchan música, otros escuchan Corán y algunos puede incluso escuchar los mensajes que fluyen en las ondas que corren por el espacio. ¿Creéis que hay aquí otros sonidos?¿Por qué no las oímos? Porque no tenemos estos auriculares. Pero si tú traes una radio se pueden escuchar. Si traes una TV es puede ver y escuchar. Y si conviertes tu corazón en una radio y una TV podréis conectar con esas otras ondas que fluyen por el espacio y que la gente no ve ni oye. Y este es el objetivo de estos encuentros, afinar nuestros corazones en la meditación para alcanzar a escuchar y ver aquello que no se escucha ni se ve. Esto es lo que es importante. Todo lo que hemos escuchado hoy aquí viene de mi maestro Mawlana Sheij Muhammad Nazim Adil Al Haqqani, que Allah le de una larga vida: el objetivo de encuentros como este es escuchar y ver lo que no se escucha y no se ve.

Que Dios nos perdone y bendiga este encuentro, que Dios os de una vida feliz y nos guíe a todos por este camino, el camino de todos los mensajeros, el camino de Moisés, el camino de Jesús, el camino de Muhammad (s.a.w.s.). Moisés tuvo sus seguidores que creían en él, Jesús tuvo sus seguidores que creían en él y Muhammad (s.a.w.s.) tenía seguidores que creían en él.

Primero vino Moisés y tenía gente que creía en él, luego llegó Jesús y la gente que creía en Jesús también tenía que creer en Moisés. Luego vino Muhammad y la gente que creía en él tenía que creer en Moisés y también tenía que creer en Jesús. No puedes ser Musulmán y no creer en Jesús y en Moisés. Que Allah nos guíe. Por seguro que hay santos en este encuentro. No penséis que este encuentro es aquí en este lugar, esto es una imagen. Este encuentro sucede de una forma similar en la presencia de los santos. Y cuando algo así sucede, esos santos tienen la obligación y la responsabilidad de llevar este encuentro a la presencia de los profetas y los profetas tienen la responsabilidad de limpiarlo y presentarlo en la presencia de Dios todopoderoso. Porque Dios ha dicho que tiene ángeles deambulando por las calles y cuando ellos encuentran gente que se sienta a recordar a su Señor ellos los acompañan hasta que alcanzan el primer cielo y esta gente está a salvo, incluso aquellos que estuvieron presentes un instante, y estos ángeles están aquí moviéndose en círculos. Que Dios nos perdone. Fatiha.

1 comentario:

Amatulquddus dijo...

As salamu alaykum querida hermana. Ahora me fijo más en la luna y en las estrellas, cuando amanece y anochece, en cada insecto y en cada planta. Y, sobre todo, me fijo más en los seres humanos con los que interactúo cada día. Pienso en las palabras que acabo de leer y me doy cuenta que todo habla bajo esas sutiles ondas que no se ven ni se sienten. Cada criatura, viva o no, emite los sonidos que nuestro corazón quiere, desea, escuchar. Y, cuando esto sucede, todo mi pequeño o gran universo personal se transforma, y se transforma porque se une al resto creado. Y, en ese momento, es cuando todos los problemas desaparecen, porque realmente sabes que estás en las Manos de tu Señor, y todo lo que suceda o deje de suceder seguirá siempre el ritmo y el compás de todo el universo creado. Ritmo y compás sabiamente acompasado y sin fallos.
Que Allah swt te bendiga hermana.